Cada vez se valora menos la capacidad de compromiso y de sacrificio, por eso quería presentaros a un ejemplo de ello, a un ejemplo de jugador de rugby, de hecho, el mejor ejemplo de jugador de rugby:
Sin duda es uno de los mejores All Blacks del mundo, no solo por su incomparable poderío físico, inteligencia y buen jugar, sino por su capacidad de superación y por levantarse como poderoso guerrero después de caer una y mil veces.
Hablo de Jonah Lomu, un jugador de rugby Neozelandes de 1,91 metros de altura, con un peso de mas de 120 kg capaz de correr 100 metros en apenas 10 segundos. Personalmente no me gustaría estar nunca delante suyo ya que dudo mucho que sobreviva, es al único jugador que tienen pánico todas las defensas.
Después de haber llegado hasta la cima mundial del rugby, viviendo por y para el, tuvo un problema de riñón y estuvo tres años sin jugar. Pero cuando nadie daba un duro por el se ha vuelto a recuperar poco a poco a base de duro entrenamiento (incluso con la selección de velocistas ingleses) y hoy en día ya ha vuelto al terreno de juego. Su objetivo será llegar a al Mundial de Francia este año. ¿Lo conseguirá?
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